Greyfriars Bobby es, con toda seguridad, el perro más famoso de Edimburgo y es un claro ejemplo de lo fiel que puede llegar a ser este tipo de animales.
La historia de Greyfriars Bobby
Bobby era un perro cuyo nacimiento se puede estimar en 1856. Este vivió durante dos años junto a su dueño John Gray, un vigilante nocturno que murió por tuberculosis y que recibió la sepultura en el cercano cementerio de Greyfriars Kirkyard. Desde ese momento y hasta su muerte en 1872 Bobby permaneció junto a la tumba de su amo.
Durante el tiempo que estuvo vivo Bobby se hizo famoso debido a su gran fidelidad. También se gano el amor de Sir William Chambers (por aquel entonces alcalde de la ciudad) quien adquirió su licencia y le regalo un collar.
La estatua de Greyfriars Bobby
La estatua que actualmente se puede ver en Edimburgo fue realizada un año después del fallecimiento del perro gracias a Angela Burdett-Coutts una de las mujeres más ricas del momento.
Curiosidades
Greyfriars Bobby ha servido de inspiración para la realización de algunas películas como “Las aventuras de Greyfriars Bobby” o para la novela de Eleanor Atkinson “Greyfriars Bobby”.
Dirección: 30-34 Candlemaker Row, Edimburgo
Autobús:
- Lineas con parada en las proximidades del Greyfriars Bobby: 2, 9, 23, 27, 29, 35, 41, 42, 45, 47, 67, X54, X61
