El Jardín de Mont des Arts es un punto destacado dentro del conjunto monumental más señorial que atesora el patrimonio de Bruselas. Tal vez por eso se diseñaron estos grandilocuentes jardines entre los años 1954 y 1965, es decir, no se trata de un espacio con una larguísima historia como otros que hay cercanos, como la vecina iglesia de Nuestra Señora del Sablón o los edificios palaciegos de la Place Royale.

El espacio ajardinado está dominado por dos estatuas que representan a los reyes Alberto I, montado a caballo, y en el otro extremo, su pareja la reina Isabel, ambas esculturas mirando en la distancia entre sí y realizadas en 1951 por Courtens.

La colina de Mont des Arts

De esta manera el verdor del ajardinamiento da la bienvenida a los visitantes al complejo arquitectónico de Mont des Arts, una colina dentro del casco histórico bruselense donde se encuentran sus principales museos. Y también otro monumentos destacados como el Palacio de la Dinastía, alzado sobre unas arcadas y donde destaca un enorme reloj de carrillón con 24 campanas animadas con figuras históricas del pasado belga.

Y justo a continuación de este edificio se encuentra el Palacio de Congresos, dedicado prácticamente a mostrar las obras de arte de una antología de artistas belgas contemporáneos. Y por supuesto, dentro de todo el conjunto monumental que rodea los jardines de Mont des Arts también destaca el volumen de la gran biblioteca de la Albertina. Es decir, la práctica mayoría de edificios que rodean esta zona verde son de una poderosa monumentalidad.

En las proximidades de los jardines

No obstante, una vez que se sale de la plaza por la rue de Musée para encaminarse hacia la cima de Mont des Arts se puede llegar hasta el número 1 de la rue de Ravenstein, donde se encuentra un bonito edificio del siglo XV. Se trata del Hotel Ravenstein.

Y también continauando por ese camino se llega hasta otra manifestación arquitectónica bien interesante aunque de un carácter bien diferente. Se trata de unos antiguos almacenes denominados Old England. Concretamente se encuentran en la rue Montagne de la Cour-Hofberg. Es un edificio de 1899 donde destaca su fachada construida a base vidrio y hierro, los materiales típicos de este tipo de arquitectura industrial.

Está claro que en la actualidad esa función como factoría se ha perdido con el crecimiento de la ciudad moderna, pero la belleza del edificio provocó que no se derribara como otros similares. Todo lo contrario, fue restaurado y en la actualidad alberga en su interior el Museo de los Instrumentos Musicales.

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Escrito por Armando Cerra