La Galería o Pinacoteca Nacional conforma junto al Nuevo Museo de la Acrópolis y el Museo Arqueológico Nacional la gran triada de los museos atenienses. No obstante, la Pinacoteca Nacional está totalmente especializada en pintura, lo cual la distingue de los otros dos museos. Y es que no hay que olvidar que la palabra «pinacoteca» procede del griego antiguo, cuando se usaba para denominar la galería de pinturas que solía haber a la entrada de los templos con representaciones de sus dioses del Olimpo.

Un museo renovado

A principios del siglo XXI, la Galería Nacional, situada en la avenida Vasileos Konstantinou, 50, fue objeto de una profunda remodelación, para adecuar su exposición a los nuevos tiempos, incorporando para ello modernas tecnologías y servicios para satisfacer las necesidades y gustos de los visitantes. Por eso se trata de un museo contemporáneo en el que se puede hacer un recorrido histórico y cronológico por la pintura griega desde hace siglos.

De lo antiguo a lo moderno

La exposición comienza con muestras de lo que fue la pintura postbizantina, para después exponer ejemplos de la pintura de la escuela jónica que evolucionó hacia una pintura de temática más laica.

Además entre lo más destacado de la pintura helena que guarda la Pinacoteca Nacional se encuentran tres obras del El Greco, de las pocas que se pueden contemplar en territorio heleno en la actualidad. Se trata de las pinturas que representan El enterramiento de Cristo, San Pedro y el Concierto de Ángeles.

No obstante, lo que más llama la atención de la colección de este museo es que sus salas permiten conocer a los grandes artistas del arte contemporáneo griego, los cuales para la inmensa mayoría del público extranjero son grandes desconocidos.

Se puede comenzar con las pinturas correspondientes al periodo de finales del siglo XIX y principios del XX, que se corresponden con la fase posterior a la independencia del país, como las que realizó Nikolaos Gyzis, aquí representado por su emblemática Mirad, llega el novio celestial. Aunque también merece ser contemplada la pintura de 1855 de Theodoros Vrysaki que representa el Éxodo de Messolonghi.

Y tras conocer esas pinturas de aires decimonónicos, ya se puede adentrar el visitante en las siguientes salas para conocer los movimientos y artistas más vanguardias de Grecia, desde el pintor postimpresionista Konstantinos Maleas hasta el Engonopuolous o el escultor Alexandro Soutzos.

Es decir, la visita a la Pinacoteca Nacional de Atenas es una buena opción para descubrir como el arte griego no se acabó con los mármoles de la Antigüedad.

photo credit: Tilemahos Efthimiadis via photopin cc

Escrito por Armando Cerra