El permanente tránsito de personas que pasean por via dei Calzauoli hace que la práctica mayoría de visitantes que recorren Florencia pasen ante el pórtico cubierto del Mercado Nuevo, situado frente a la iglesia de Orsanmichele.
El edificio del Mercado Nuevo
Pese a ser lo que queda de un antiguo mercado donde se exponían los productos de los orfebres y de la prestigiosa artesanía de la seda florentina, se trata de una construcción de enorme elegancia y solemnidad. Con su planta cuadrangular alzada sobre pilares y abierta mediante altísimos arcos de medio punto posee una prestancia estética más que destacada.
El Mercado Nuevo se construyó a mediados del siglo XVI por deseos del gran duque Fernando I de Médicis. Y en la actualidad sigue sirviendo para acoger un mercado, aunque en este caso de puestos donde se halla la artesanía local en forma de trabajos en piel, cestería o textiles, además de los souvenirs más típicos y tópicos que buscan como regalo gran parte de los turistas. Ojo, no todo lo que se muestra hoy en día en el Mercado Nuevo es de fabricación local, y ni siquiera artesanal. Hay que tener en cuenta que es un lugar de gran afluencia turística y por lo tanto, la picaresca ha hecho que se instalen allí puestos que, sin importarles en exceso la calidad o autenticidad de su género, tan sólo se preocupan por vender al turista.
La Fuente del Jabalí
Por lo tanto es un lugar de visita obligada para quién pasa unos días en Florencia, y no sólo por las compras o el particular encanto de la construcción. También porque en el propio pórtico del Mercado Nuevo se encuentra la Fuente del Jabalí, conocido cariñosamente por los florentinos como el Cerdito.
Esta fuente como indica su nombre es una escultura de un jabalí que se realizó en el siglo XVII. Desde entonces se comenzó a crear la leyenda de que quién visita Florencia había de tocarle el hocico a la figura del animal, lo cual se convertía en una garantía de que tarde o temprano volvería a la capital de la Toscana. Ésa es la razón de que cuando uno se acerca a la escultura, siempre hay gente alrededor suyo y que cuando por fin se ve la fuente, se observa como todo el morro del jabalí de bronce tiene un pulido perfecto tras el constante manoseo que recibe. Por cierto, la tradición dice que no basta con tocar el hocico, también es necesario tirar una moneda al agua de la fuente.
Dirección: Piazza del Mercato Nuovo, Florencia
Horario:
- Lunes a domingo: 9:00 a 19:00
Autobús:
- Lineas de autobús con parada en las inmediaciones del Mercado Nuevo: 6, 11, 36, C1, C2, C3, D