La Place Royale es uno de los epicentros de Bruselas para todos los turistas, pero especialmente para todos aquellos que sean asiduos visitantes de los museos de las ciudades a las que viajan. Ya que aquí y en sus inmediaciones se hallan el Museo de Arte Antiguo, el Museo de Arte Moderno, el Museo de la Dinastia, y por supuesto el Museo Magritte.

René Magritte

Este pintor belga nacido en 1898 y fallecido en 1967 fue uno de los personajes más innovadores y revolucionarios durante el periodo de las vanguardias históricas del arte europeo. Y si bien su estilo se ha calificado como arte surrealista, lo cierto es que su producción es sobre todo una creación tremendamente personal, y a veces inclasificable. Pero siempre se caracterizó por usar la pintura de corte figurativo y realista, frente a otras corrientes que renunciaron a que las formas fueran reconocibles, como es el arte abstracto o el cubismo.

El recorrido por el Museo Magritte

A su ingente producción se dedica este museo, cuya apertura es relativamente reciente, ya que este nuevo museo fue inaugurado en el año 2009. Para visitarlo es bueno saber que los tickets de entrada se han de adquirir en el número 3 de la rue de la Régence. Mientras que la entrada a la exposición se hace por la propia Place Royale.

El museo ocupa las tres plantas del Palacio Altentoh, situado en la misma Place Royale. Si bien el edificio fue profundamente renovado para acoger esta instalación tremendamente novedosa, acorde con el arte de este pintor. No obstante, su fachada suntuosa de aires neoclásicos ya plantea el primer contraste con los cuadros de Magritte de su interior.

Y es que la visita al Museo Magritte hace un recorrido por toda su vida creativa. Para seguirlo en orden se hace necesario comenzar por la planta tercera, dedicada a sus obras de formación y juventud. Mientras que cuando se llega a la segunda planta se descubre un periodo posterior de su vida, que tal vez sea el menos conocido. Es el preámbulo para bajar a la primera planta y contemplar algunas de sus obras maestras más afamadas como El Imperio de la Luz o Sherezade.

Otro Museo René Magritte

Aquellos que deseen conocer más de la vida y obra de este personaje, el complemento ideal es visitar después el Museo René Magritte, mucho más modesto que el de la Place Royale. En realidad, este museo fue la casa donde vivió y trabajó este artista durante 24 años. Y se halla en la rue Esseghem, 135, un tanto alejado del centro, pero accesible tras un trayecto en metro hasta la parada de Bockstael.

Escrito por Armando Cerra